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La Torá y la plegaria

180) Rabí Shimon abrió y dijo, “Está escrito, ‘Entonces volvió Ezequías su rostro a la pared y rezó al Señor’. Ven y ve cuán grande es el poder de la Torá y cuán superior es a todo. Todo aquel que se esfuerza en la Torá no teme a nada de lo alto o de lo bajo, y no tiene temor de las malas enfermedades en el mundo porque está aferrado al árbol de la vida y aprende de él cada día.

181) “Esto es así porque la Torá enseña a la persona a seguir el camino de la verdad, y le enseña el consejo de cómo arrepentirse ante su Señor, para revocar la sentencia, pues incluso si ha sido decretado que la sentencia no será revocada, inmediatamente es anulada y apartada de él, y no se presentará a la persona en este mundo. Por esta razón, uno debe esforzarse en la Torá de día y de noche y nunca abandonarla, como está escrito, ‘Y meditarás en ella de día y de noche’. Y si uno se desvía de la Torá y se aleja, es como si se apartase del árbol de la vida”.

Explicación: Él inició con la plegaria del verso, “Entonces volvió Ezequías su rostro a la pared”, y la interpreta sólo con la Torá. El asunto es que este consejo se presentó a él sólo por la fuerza de la Torá, mediante la cual él obtuvo el llegar al arrepentimiento completo hasta que nada se interponía entre él y la pared, la Divinidad sagrada, y es debido a esto que su plegaria fue aceptada. Por lo tanto, la sentencia de muerte que había sido decretada quedó revocada. Es debido a esto que concluye que debido a que observamos que el poder de la Torá es tan inmenso como para revocar una sentencia de muerte, “Uno debe esforzarse en la Torá de día y de noche y nunca alejarse de ella”.

182) Ven y ve un consejo para la persona: cuando llega la noche y se prepara para acostarse, debe aceptar sobre sí el reino de lo alto con el corazón íntegro y comenzar por entregarle su alma a Él, e inmediatamente será salvado de cualquier mala enfermedad y de todos los espíritus malos, que no la dominarán.

Explicación: El Señor llamó a la luz, “día”, la luz de Dvekut (adhesión) y Kedusha que obtenemos del Creador. Este es el dominio del día. Él llamó a la oscuridad “noche”, las fuerzas de separación que nos separan de Su luz. Este es el dominio de la noche. Por lo tanto, dormimos por la noche, que es una sexagésima parte de la muerte, lo cual es el gobierno de Sitra Ajra. Con estos dos dominios, no podemos aferrarnos a Él para siempre, porque sustraemos Su Dvekut con la fuerza del dominio de la noche, que siempre vuelve y viene sobre nosotros y nos impide hacer el servicio para el Creador.

Para corregir eso, Rabí Shimon nos da un consejo: Cada noche, antes de dormir, uno debe tomar sobre sí mismo el reino de lo alto con el corazón íntegro. Esto es así porque cuando la noche se corrige, como en el acto de la creación, cuando escribe, “Y fue de tarde y fue de mañana, un día”, cuando la noche y el día se unen en un solo cuerpo y un solo día, entonces a la noche se le llama, “el dominio de Maljut” y ninguna Klipa se encuentra mezclada con ella.

Por lo tanto, una persona debe tomar sobre sí misma a Maljut superior (el reino) con corazón íntegro sin ninguna división entre sí mismo y Maljut. Esto es, debe tomar sobre sí mismo el reino del cielo para la vida o para la muerte, y nada en el mundo, y nada en el mundo le apartará del reino superior, como está escrito, “Y amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma y con todo tu fuerza. Y si él lo ha aceptado con el corazón íntegro, tiene la certeza de que nada puede apartarle del Creador.

Con esto, se considera que él ha avanzado al hacer el depósito de su alma, porque él vino en primer lugar a entregar su alma en las manos del Creador, para observar Sus Mitzvot en su totalidad, con una devoción completa. Por esta razón, cuando duerme y su espíritu se separa, ya no probará en ella la sexagésima parte de la muerte, que es el poder de SAM, sino la devoción en el camino de la Mitzvá, pues el poder de la muerte, ya no le domina, pues la ha hecho entrar en el poder de la devoción de una Mitzvá.

Y cuando lo hace, el dominio de la noche ya no puede dañarlo más y disminuirlo de la amabilidad del servicio del Creador, pues para él, la tarde y la mañana son un día y la noche sólo forma parte real del día. Por consiguiente, de inmediato se salva de cualquier enfermedad mala y de todos los espíritus malos, que no lo dominan, pues su noche ya se ha separado del dominio de Sitra Ajra, pues nada podrá interponerse entre él y la Santa Divinidad y las fuerzas de Sitra Ajra y el Din no lo gobiernan más.

183) Y por la mañana, cuando él se levanta de su lecho, debe bendecir a su Señor, entrar en Su morada y postrarse ante Su Santuario con gran temor. Y entonces él debe pronunciar su rezo y tomar consejo de los patriarcas santos, como está escrito, “Mas yo, por la abundancia de Tu bondad, entraré en Tu casa, y me postraré en tu santo Templo me prosterno temeroso de Ti”.

Comentario: “Por la abundancia de Tu bondad” se refiere a bendecir a su Señor por las bondades que Él ha hecho con él. “Entraré en Tu casa”, significa entrar en Su Casa. “Y me postraré en tu santo Templo”, quiere decir inclinarse ante Su Santuario, “temeroso de Ti”, significa con gran temor, y entonces pronunciará su rezo.

Es debido a esto que se dijo que él debe tomar consejo de los santos patriarcas, pues la plegaria que hacemos es la corrección de la Sagrada Divinidad, para extenderle la abundancia, para satisfacer todas sus deficiencias, pues entonces, todas las peticiones están en forma plural, como “Y concédenos conocerte a Ti”, o “Padre nuestro, Haz que regresemos a Tu ley”.

Esto es así porque la plegaria es para todo Israel, porque todo lo que hay en la Divinidad Sagrada existe en todo Israel y lo que le falta a ella, le falta a todo Israel. Se deduce que cuando rezamos para todo Israel, rezamos para la Divinidad Sagrada, pues son lo mismo. Por lo tanto, antes del rezo, debemos observar las deficiencias que hay en la Divinidad, para saber lo que es necesario corregir y llenar en ella.

Sin embargo, todas las generaciones de todo Israel están incluidas en la Sagrada Divinidad y nosotros ya no necesitamos corregir todas esas correcciones que recibió de las generaciones anteriores a nosotros. Más bien, necesitamos complementarlas, para corregir lo que todavía le falta, después de sus correcciones.

Los sagrados patriarcas son la inclusión de todo Israel. Ellos son las tres raíces de las 6000,000 almas de Israel de cada generación hasta el final de la corrección. Y todas las extensiones y otorgamientos que todo Israel extiende y recibe en todas las generaciones las reciben primero los santos patriarcas. Desde ellos, la abundancia llega a todo Israel en esa generación que extendió la abundancia. Esto es así porque este es el orden espiritual, es decir que ninguna rama puede recibir nada, sino a través de su raíz; la iluminación primaria se queda en la raíz, y solo una parte de ella se extiende a la rama. Por lo tanto resulta que todas las correcciones que ya se han corregido en la Sagrada Divinidad existen y permanecen en las almas de nuestros santos patriarcas.

Por lo tanto, uno no debe entrar en la casa de la congregación, sin haber antes consultado con Abraham, Isaac y Jacob, pues toda nuestra plegaria es para complementar lo que todavía falta en la Divinidad, luego de las correcciones que se han realizado hasta ahora. Por lo tanto, primero debemos conocer y extender todas las correcciones que ya han sido corregidas en la Sagrada Divinidad y después sabremos aquello que todavía es necesario agregarles.

Por esta razón, uno no debe entrar en la casa de la congregación, sin antes buscar el consejo de los santos patriarcas, pues uno debe consultar a los santos patriarcas y conocer lo que falta por corregir. Y esto es posible sólo después que hemos extendido en la Sagrada Divinidad todo lo que los santos patriarcas ya han corregido en ella, y luego veremos lo que a ella le falta todavía, pues ellos ya han establecido la plegaria que es la Sagrada Divinidad.

La corrección de Abraham se llama “el rezo matutino”, la corrección de Isaac se llama “el rezo de la tarde”, y la corrección de Jacob, “el rezo vespertino”. Por lo tanto, primero debemos extender la medida completa de corrección que ellos ya han corregido en la plegaria, entonces sabremos por lo que debemos rezar y corregir, lo que todavía le falta a ella.

184) Una persona no debe entrar en la casa de la congregación sin antes haber consultado con Abraham, Isaac y Jacob y haber recibido el permiso. Esto es porque ellos instituyeron la plegaria delante del Creador, como está escrito, “Pero yo por Tu abundancia de bondades, entraré en Tu casa”, que es Abraham, quien es Jésed (la bondad). “Y me postraré en Tu Santuario”, se refiere a Isaac, de cuyo lado Maljut es llamada “Palacio”. “Temeroso de Ti” se refiere a Jacob, Tiféret que se llama “terrible”. Al comienzo uno debe integrarse a ellos, y luego entrar en la casa de la congregación y pronunciar su plegaria. Entonces está escrito, “Y Él me dijo, ‘Israel, tu eres mi siervo y en ti mostraré mi gloria’”.

Aquí, él explica las tres correcciones generales que los patriarcas llevaron a cabo en la Sagrada Divinidad. Abraham la corrigió para que fuese una casa, es decir una residencia permanente, igual que una persona se encuentra en su propia casa permanentemente. Isaac añadió una corrección y la corrigió para que fuera un Sagrado Templo. Esto quiere decir que el Rey mora con ella permanentemente, pues el Rey siempre está en Su palacio.

Jacob añadió una corrección y la corrigió para que tuviera temor, lo cual es la puerta a la morada, la apertura tanto para la casa con la Sagrada Divinidad así como para el Templo Sagrado con ella, como está escrito, “Cuán temible es este lugar y es la puerta del cielo”.

Y una vez que la persona incluye todas esas tres correcciones de los patriarcas en toda su extensión, puede conocer la medida completa que ya se ha corregido en la Sagrada Divinidad y entrará en la casa de la asamblea y pronunciará su rezo, para corregir en la Divinidad lo que aún le falta a ella.

Explicación: Abraham es la raíz de Jésed en las almas de Israel, pues él es quien corrigió a la Sagrada Divinidad para ser un receptáculo para la Luz de Jésed. Ella recibió las Jasadim para todas las almas de Israel en su pleno. De haber permanecido así, todo Israel hubiera estado adherido en permanencia con el Creador y la Sagrada Divinidad sería la casa de Maljut, colmada con todos los deleites y placeres y ni una sola persona hubiera querido apartarse de ella ni por un minuto.

Sin embargo, toda la corrección de Abraham consistió en hacer un receptáculo completo para la luz de Jasadim, si ninguna posibilidad de daño. En otras palabras, él elevó a la sagrada Divinidad al otorgamiento y a dar satisfacción a su Hacedor y no recibir nada para su propio deleite, pues esta es la cualidad y el receptáculo de la luz de Jésed. Está escrito acerca de esto, “Cualquiera que diga ‘Lo que es mío es tuyo y lo que es tuyo es tuyo – un Jasid (de la palabra Jésed), pues no exige nada para su propio placer.

Y puesto que todas las restricciones y todo el aferramiento de Sitra Ajra son sólo dentro de la recepción para uno mismo, se deduce que por esto, él ha enteramente eliminado la escoria de las Klipot y Sitra Ajra, y la Divinidad ha sido establecida en pureza completa. Sin embargo, todo esto no completó el pensamiento de la creación, pues la esencia del pensamiento de la creación es deleitar a Sus criaturas y la medida de placer depende y se mide por la cantidad del deseo de recibir, en donde la cantidad del deseo de recibir, es la medida del placer cuando recibe.

Por consiguiente, una vez que la Divinidad ha sido corregida solamente en una vasija de otorgamiento, sin ninguna recepción para sí misma, lo cual es partir de la recepción para el Creador y darle solamente a Él, de cualquier forma no se ha efectuado ninguna corrección por esto al pensamiento básico de la creación, que llega sólo por cuán grande es el deseo de recibir.

Este es el significado de la fecundación de Isaac por Abraham. Cuando Isaac encontró a la Divinidad en la perfección y plenitud máxima con la luz de Jésed a través de las correcciones de Abraham, sintió la deficiencia en ella, esto es, que ella no era apta para la recepción de todo aquello que está contenido en el pensamiento de la creación. Por esta razón fue a corregirla para que fuese un receptáculo apto para recibir esta plenitud deseada en el pensamiento de la creación. Él evocó el deseo para recibir del Creador, también, pero solamente en recepción con el propósito de otorgar. Esto significa que él tiene un gran deseo de recibir, pero solo porque el Otorgante lo desea. Si el Otorgante no lo hubiera deseado, no habría existido en él el deseo de recibir de Él.

Es sabido que la recepción para otorgar es considerada como otorgamiento real. Por lo tanto, Sitra Ajra no tiene aferramiento allí, en este deseo de recibir. Por esta razón la Sagrada Divinidad fue establecida por él en la última, gran perfección, pues ahora era apta para recibir todas las bondades y la dulzuras de todo aquello que el Creador contempló para deleitar a Sus criaturas cuando ellas surgieron en la mente para crearlas.

Por esta razón, ahora la Sagrada Divinidad es llamada “Su Sagrado Templo”, pues ahora el Rey está con ella, en toda su grandeza y esplendor, como un rey en su palacio. Sin embargo, con respecto a la corrección de Abraham, a ella se le llama solamente “una casa”, es decir, la casa de Maljut pues allí Su gloria y majestad enteras no eran todavía aparentes pues la gloria del rey es aparente solamente en su palacio especial.

Por lo tanto, se considera que Isaac corrigió toda la Guevurá en las almas de Israel, es decir, la dulcificación de todos Dinim con la guía del Creador. Esto es así porque todas las restricciones, el sufrimiento, los castigos que llegan a todo el mundo son solamente para corregir las vasijas de recepción de las almas, para que sean merecedoras de recibir toda la bondad incluida en el pensamiento de la creación. Y como Isaac ya había corregido la Divinidad en esta plenitud, al hacerlo, toda la Guevurá fue corregida, ya que ellos ya han llegado a su deseado objetivo.

No obstante, incluso su corrección no permaneció así, ya que el mundo todavía no estaba calificado para el fin de la corrección. Por lo tanto, el malvado Esaú salió de él, y corrompió su corrección y no duró en ella, para recibir solamente con la intención de otorgar, como Isaac había corregido. En vez de hacerlo, él cayó en la auto-recepción. Es decir, incluso cuando descubrió que el Otorgante no quería que él recibiese, él quiso recibir para su propio placer. Por lo tanto, las Klipot y la Sitra Ajra se aferraron a él, refiriéndose a ser rubicundo y velludo. Por esa razón, él bajó los pies de Maljut a las Klipot una vez más, como está escrito, "Y sus pies descienden a la muerte".

Y cuando Jacob vio la corrupción del malvado Esaú, él fue y corrigió la Santa Divinidad con la cualidad de Yira (temor), como está escrito, "Con su mano aferrada al talón de Esaú". Es decir, ya que Jacob vio la corrupción de Esaú en la Divinidad, él se corrigió a sí mismo con gran Yira hasta que elevó la Divinidad a una corona sobre su cabeza, con lo cual se aferró a las dos correcciones - la de Abraham y la de Isaac - al mismo tiempo, y ningún defecto salió de él. Pero esta corrección todavía no es el fin de la corrección, ya que Yira es similar al temor del pecado, ya que el talón de Esaú le causó ese miedo, sin pecar como él.

Pero al final de la corrección el talón de Esaú será cancelado, como está escrito, "La muerte será consumida para siempre". Entonces, el temor será solamente por causa de la grandeza del Creador y porque Él reina sobre todo. Para sí mismo, Jacob ciertamente alcanzó esa verdadera Yirá, pero para todo Israel, esa corrección permanece a ser realizada por todas las generaciones que le siguen, hasta el final de la corrección.

Está escrito, "Pero yo por la abundancia de Tu bondad entraré en Tu casa”. Este es Abraham, Jésed, ya que Abraham la corrigió para ser la casa de Maljut, llena de abundancia, de la luz de Jésed.

"Y me postraré en Tu santo templo", se refiere a Isaac, en cuyo lado, Maljut se llama "un templo" ya que Isaac la corrigió para que sea el santo Templo, para la grandeza y la gloria del Rey, apropiado para el Creador.

"Temeroso de Ti", se refiere a Jacob, Tiféret, que es llamado "temible, ya que Jacob la corrigió con la cualidad de Yira (temor). Al hacerlo, él la corrigió para que sea un receptáculo de todas las correcciones de Abraham e Isaac juntos, y debe primero estar incluida en ellos, ya que cómo sabrá qué queda aún para ser corregido por la Divinidad si él no incluye a su ser en todas esas tres correcciones que los santos patriarcas ya han corregido en ella. Es decir, debe asumir que debe comportarse de acuerdo a esas correcciones, y esto se considera que él estaba incluido en su cualidad.

Y solo después de ser incluido en todas las tres correcciones de nuestros santos padres él comenzará a corregir la Divinidad, desde el lugar que Jacob, el patriarca ha dejado para nosotros: para elevar la Yira (temor) a la cualidad de exaltación porque Él es grande y reina en todo. Posteriormente, él entrará a la casa de la congregación y rezará su plegaria. Es decir, él debe rezar y extender las luces superiores en ella, con la Yira de exaltación, para traerla hacia el final de la corrección. Entonces está escrito, “Y Él me dijo, ‘Israel, tu eres mi siervo y en ti mostraré mi gloria’”.